
PROBLEMAS METABÓLICOS
Vuelve a disfrutar de la comida como antes
Con el paso del tiempo, el metabolismo puede verse afectado por diversos factores como son la edad, el peso, la altura, la genética, las subidas y bajadas de peso, los procesos hormonales como la regla, la ovulación, los embarazos, la menopausia, etc. Este tipo de cambios en nuestro cuerpo provocan que el metabolismo vaya variando a lo largo de nuestra vida y esto nos perjudique con un aumento de peso no deseado o con la aparición de alguna patología, por ejemplo, tiroidea, que nos predispone, en algunos casos, a padecer sobrepeso u obesidad, si no se lleva un control correcto de la alimentación.
También pueden surgir distintas intolerancias a ciertos nutrientes, que nos provoquen un daño a nivel intestinal que, la mayoría de veces, solo puede ser controlados mediante una planificación nutricional específica para esa intolerancia o alergia alimentaria. En estos casos, seguirás, acompañado en todo momento de nuestras dietistas-nutricionistas, todo el proceso de reincorporación de alimentos necesario para que mejoren los síntomas de estas patologías adaptándonos totalmente a ti.
En Mayte Ponce Nutrición y Dietética, contamos con un equipo de nutricionistas altamente cualificados para poder planificar dietas totalmente personalizadas, saludables y equilibradas tanto para este tipo de enfermedades metabólicas como para todas aquellas alergias o intolerancias alimentarias que pueda padecer la persona.
Intolerancia y alergia alimentaria

Existe una clara diferencia entre una alergia alimentaria y una intolerancia alimentaria. Una alergia alimentaria es una respuesta anormal de nuestro sistema inmunitario ante la presencia de determinados componentes de un alimento, mientras que una intolerancia alimentaria es aquella forma de sensibilidad a determinados alimentos en la que no interviene ningún mecanismo inmunológico.
En el caso de la alergia alimentaria, podemos identificar claramente a qué componente del alimento ha respondido nuestro cuerpo mediante una prueba de laboratorio y por qué los síntomas clínicos son inmediatos. Por comer o tocar un alimento, nuestra piel puede empezar a mostrar hinchazón o urticaria, puede afectar a nuestro aparato digestivo dando lugar a dolores abdominales y vómitos e incluso afectar a nuestro aparato respiratorio y todo el organismo.
En el caso de la intolerancia alimentaria a algún alimento, la aparición de síntomas no es inmediata y cuando aparecen suelen ser síntomas gastrointestinales o dermatológicos.
Actualmente las alergias e intolerancias más conocidas y habituales son: la alergia a la proteína de la leche de vaca, la intolerancia a la lactosa, la intolerancia a la fructosa y la intolerancia al gluten, entre otros. Estas intolerancias y alergias no siempre se producen de igual manera ante distintas personas, es por ello que todas nuestras dietas están diseñadas especialmente para cada persona.
Tratamiento de la celiaquía

La enfermedad celíaca es una intolerancia al gluten de carácter permanente que provoca, en individuos genéticamente predispuestos, una atrofia de las vellosidades del intestino delgado que afecta a la capacidad de absorber los nutrientes de los alimentos. El gluten es una proteína que está presente en cereales como el trigo, la avena, la cebada, el centeno y la espelta. Además, está presente también en multitud de productos que una persona podría consumir diariamente.
La ingesta de gluten en personas celíacas, aunque sea en muy poca cantidad, provoca una reacción inmunitaria en el intestino delgado que causa una inflamación crónica que tiene como consecuencia la atrofia de las vellosidades intestinales, acompañada de síntomas que varían según los casos (dolor abdominal, estreñimiento, náuseas y vómitos, disminución del apetito, etc.).
En los pacientes celíacos estas vellosidades se atrofian completamente, lo que daña la mucosa intestinal. Esta reducción de las vellosidades intestinales disminuye o impide la absorción de los nutrientes: proteínas, grasas, hidratos de carbono, vitaminas y sales minerales, y causa desequilibrios nutricionales y desnutrición.
La enfermedad celíaca o celiaquía se puede controlar a través de una dieta para celíacos personalizada. Llevar una dieta personalizada basada en alimentos sin gluten, no es tan complicado como a priori puede parecer. Deberemos tener en cuenta aquellos cereales que lo contienen, así como aquellos productos que por su manipulación pueden contener trazas de estos alimentos que sí contienen gluten.
El tratamiento dietético de la celiaquía consiste en la ingesta de una dieta sin gluten de por vida. Esta patología no tiene cura, pero una vez se produce el cambio de dieta a una dieta con alimentos sin gluten, se observa una mejoría de los síntomas al recuperarse las vellosidades intestinales en un periodo de tiempo variable que pueden ser de meses o incluso de semanas.
El paciente celíaco debe basar su dieta en alimentos naturales: legumbres, tubérculos, carnes, pescados, huevos, frutas, verduras, hortalizas y cereales sin gluten (arroz y maíz). Deben evitarse, en la medida de lo posible, los alimentos elaborados y/o envasados, ya que en estos es más difícil garantizar la ausencia de gluten. Además no deben consumirse alimentos, bebidas ni medicamentos que contengan cualquier producto derivado de trigo, centeno, cebada o avena.
En Mayte Ponce Nutrición y Dietética realizaremos una dieta sin gluten especial para tu caso, que se adapte a tus gustos, estilo de vida y nivel de actividad física.
Enfermedades de la tiroides

La glándula tiroides está implicada en aspectos diarios como pueden ser la regulación de la temperatura corporal, la agilidad mental, la solidez en los huesos o el ritmo cardíaco y algunas enfermedades del tiroides pueden presentarse como nódulos tiroideos, tumores, hipotiroidismo e hipertiroidismo.
El hipotiroidismo aparece cuando hay un déficit de hormona tiroidea que actúa sobre los tejidos, esta deficiencia generalmente es debida a que la glándula tiroides segrega menos cantidad de hormona tiroidea de la que el cuerpo necesita. Los síntomas de hipotiroidismo más comunes son: sensación de frío continua, disminución de la transpiración, la piel está más seca y áspera, el vello y el pelo se vuelve quebradizo y débil y tiende a caerse, estreñimiento, falta de concentración, falta de atención, etc. Además, en la mayoría de los casos, el hipotiroidismo produce sobrepeso u obesidad.
El hipertiroidismo se presenta cuando existe un exceso de hormona tiroidea en el organismo, este exceso tiene diversas causas. Las manifestaciones más claras del hipertiroidismo son: aumento del calor corporal, piel húmeda por sudoración, osteoporosis, debilidad muscular, etc.
En estos casos, se produce un incremento del metabolismo energético, por lo que el síntoma claro del hipertiroidismo es que la persona comienza a adelgazar aunque su apetito e ingesta sea normal o incluso haya aumentado.
Existen muchos otros problemas que surgen a raíz de las enfermedades de la tiroides, si es tu caso, no dudes en contactar con nosotros para saber qué dieta personalizada se ajusta mejor a tus necesidades.
Problemas derivados de una mala alimentación

Conseguir regular el metabolismo supondrá una mejora palpable en nuestra calidad de vida. Nuestro organismo utiliza el metabolismo para obtener o producir energía por medio de alimentos, sobre todo a partir de los carbohidratos, que son nuestro combustible.
Un paciente puede presentar problemas de metabolismo si aparecen complicaciones en el hígado o el páncreas.
Algunas enfermedades comunes que aparecen y pueden derivar de una mala alimentación, son: la diabetes, osteoporosis, niveles altos de colesterol, hipertensión, etc.
Nuestro equipo de dietistas nutricionistas puede ayudarte a evitar estas enfermedades, y si ya las padeces, pueden ayudarte a mejorar o incluso a que desaparezcan, según lo avanzadas que estén.
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